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archville

Atardeceres de invierno

A veces contemplo el viento, como silba mi tristeza
Tiende a golpear mi mesa, con su firme movimiento
Atardeceres de invierno, melancólica pureza
Romped mi mirada eterna, despertad en mis adentros

Desde mi ventana enredas, para ver el firmamento
En el interior ya pienso, si no serás una estrella
Cada madrugada en vela, cada poema en progreso
estio y olor a incienso, me olvido de mis problemas

Rompo a llorar y no puedo, imaginar la respuesta
Entre todas estas penas, mis ojos se haran de hielo
Sufro si al observar el cielo, pegadito aqui a mi hoguera
Donde no quemo madera, quemo mis pensamientos

Evidencias de los hechos, yo te doy las que tu quieras
Improvisando las pruebas, que demuestran que no miento
No creas que es por miedo, de construír hoy las letras
Viendo aqui mi vida entera, perderse porque ya he muerto

Imposible el argumento, cuando la nieve regresa
Es para cualquier poeta, una estación de comienzos
Rompamos los documentos, adolecidos emblemas
Niños de su voz mas tierna, que nace otra vez de nuevo

Olvidas tu buen comienzo, o acaso tu mano tiembla ?

Archville

5 comentarios

Sonia -

Pues puede que tengas razón, jeje. Saludos :)

Archville -

Ni lo uno ni lo otro. Supongo que cuando se piensa eso, es porque lo que has escrito tú lo sientes como ya tuyo y no te dice nada nuevo, aunque te ayuda a desahogarte. Cuando lo que lees ajeno, te enriquece, te proporciona algo que no tenías. Gracias por tu comentario. :)

Sonia -

Simplemente maravilloso.
Cuando leo los escritos de otras personas, a vecs pienso que lo que yo escribo no es nada... ¿Será pesimismo o realidad?

Archville -

Me alegro mucho te gustase. Gracias por tus palabras. Nunca pensé que nadie fuera a leerlo.

Juank -

Un poema hermosísimo... el invierno es para todos, llueven en algunos sitios o nieve en otros, una época sombría en la que una capa ennegrecida cubre nuestros cielos y adelantamos las agujas del reloj para ver si logramos con esto acelerar el tiempo. Lo que no nos damos cuenta, es que detrás de las nubes siempre está el sol esperando la mejor oportunidad para asomar uno de sus rayos. Mi sol ha salido esta semana y ha calentado mi vida como hacía mucho no lo hacía... y, a pesar del frío invernal, llevo mucho calor por dentro, especialmente en el corazón. :o)